Encuentro de Junioras 3º a 5º año

Queríamos decir una palabra, y la palabra era... GRACIAS!

Gracias a Dios por la vida que nos va dando tanto, gracias porque ha sido Él quien nos ha convocado a este encuentro, encuentro que va suscitando en cada una de nosotras alegría y honda gratitud por la “Buena Noticia” que se nos va revelando.

Gracias porque nos sabemos y sentimos acompañadas por todas y cada una de las hermanas del Instituto, gracias por darnos esta oportunidad de vivir esta experiencia aquí en la Casa Madre, lugar que nos aproxima un poco más a nuestras raíces, a María Ana…

“Hoy como ayer su semilla en nuestras manos”, vamos palpando un poco más de cerca los frutos de su entrega generosa a Dios y a los hermanos; ejemplo que nos estimula a vivir tras las huella de Cristo pobre encarnado en cada situación de la vida. Estamos viviendo una experiencia fundante, enriquecida desde nuestra propia identidad y diversidad cultural. Sin duda alguna son días muy intensos y con gran amplitud que nos ensancha el corazón para expresar:

Gracias a Dios, porque con AMOR va dando forma a nuestra VIDA.

Gracias a María Ana, porque en nuestro camino es una MANO GENEROSA.

Gracias a las hermanas de todo el Instituto, porque hacen posible que vivamos estos días que nos hacen crecer en AMOR y FRATERNIDAD.

Gracias a Adelaida, Isabel y Vicky, por la dedicación, el tiempo, la escucha… y por su compañía; y a todas las hermanas de la Casa Madre por sus atenciones y cariño.

Continuamos el Encuentro, adentrándonos ya en los Ejercicios Espirituales y pidiendo que el Espíritu nos conduzca a la Fuente del Agua Viva que es Cristo.

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