FMMDP en Red
Mayo - Agosto 2017
OLIMPIA IGLESIAS COUSO
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Nuestra hermana Olimpia Iglesias Couso de la Comunidad de la Residencia La Milagrosa, Lérida, Provincia Ibérica, murió en la paz del Señor, el día 25 de mayo de 2017, a los 95 años de edad y 73 de vida religiosa.
Nació en Alfoz (Lugo). Las etapas de formación y Profesión Perpetua las vivió en la Casa Madre.
Siempre trabajó en la Sanidad y en distintas casas, últimamente en esta Residencia de la Milagrosa en Lérida, porque siempre dijo que cuando se jubilara del Hospital de la Seguridad Social se dedicaría a cuidar a las ancianas. Así fue hasta que por su salud tuvo que ir poco a poco renunciando a ciertas tareas que desempeñó con mucho gusto: la portería y hacía labores para las misiones de Benín, etc.
Mujer de carácter fuerte, pero desde la verdad del evangelio. En las situaciones difíciles la Palabra era su punto de apoyo y actuación. En las reuniones y en cualquier momento siempre estaba dispuesta a comunicar sus ideas, con gran sentido de aquello que se trataba, con una mentalidad abierta a los cambios que se iban dando o que preveía.
Con el personal que trabaja en la casa, cada momento, directa o indirectamente, sabía hablar de religión oportunamente y era muy bien aceptada.
Siempre fue muy trabajadora, humana y agradable, creadora de unidad y de paz. Pero por encima de todo era fiel a la oración, Eucaristía y otras devociones.
Olimpia, damos gracias al Señor por tu testimonio de vida.
Ahora, con tu buen hacer has resucitado con Cristo y con nuestra Madre Divina
Pastora.
GENOVEVA CÁMBARA LAGUNA
Nuestra hermana Genoveva Cámbara Laguna de la Comunidad de Benavides de Órbigo, Provincia Ibérica, murió en la paz del Señor, el día 19 de junio de 2017, a los 94 años de edad y 73 de vida religiosa.
Nuestra hermana Genoveva (Encarnación), nacida en Arjona, provincia de Jaén (España) realizó el noviciado en la Curia General, profesó de votos temporales en 1944 y fue destinada a tierras andaluzas.
Villa del Río y Andújar fueron los dos colegios en los que llevó a cabo su misión de educadora, de donde salió para la casa de formación de Berruguete en Madrid (hoy Goiri). Destinada a la casa de mayores de Benavides en 2004 ayer recibió el último y definitivo destino: la Casa del Padre.
Mujer trabajadora, buena parvulista, y como tal disfrutaba con sus niños, mujer de paz y sacrificada. Quería mucho a las hermanas de comunidad y siempre hacía lo que podía por ayudar con trabajos sencillos en la misma y de limpieza del patio o jardín ayudada por su bastón y una bolsa.
Religiosa de profunda fe, orante, vivió siempre con mucha fidelidad a Dios, a su
vocación y al Instituto. Tenía un gran amor a la Madre Fundadora, repartía propaganda y animaba a todos a encomendarse a ella. (Así conoció Mª Jesús, su sobrina, a nuestra Fundadora.)
Era consciente de que el tiempo se le acababa y un signo es que las hermanas han encontrado en su mesita de noche un papel en el que les decía lo que tenían que cantar cuando ella muriera.
Por tu vida entregada en y desde el Amor, GRACIAS Genoveva.
Descansa en la Paz de Dios.
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IRENE ARIAS BARANGA
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Nuestra hermana Irene Arias Baranga de la Comunidad de Mayores de Benavides de Órbigo, Provincia Ibérica, murió en la paz del Señor, el día 21 de junio de 2017, a los 85 años de edad y 65 de vida religiosa.
Nuestra hermana Irene, era natural de Corgomo (Orense), salió de su tierra para hacer el noviciado, profesión temporal y en su momento la profesión perpetua en la Curia General. Amante de su tierra, los destinos en la vida religiosa, nunca fueron para ese lugar de tantos recuerdos.
Hermana muy buena, trabajadora, sencilla, constructora de paz, amante de la fraternidad, fundamentada en la fe y en la entrega, fueron cualidades que puso siempre a disposición de quien la necesitaba. Enfermera, por vocación asistió con cercanía y cariño a los ancianos y enfermos en sus casas (Andújar) y también en las Residencias de Cangas y Llanes en las que pasó alternativamente muchos años de su entrega, asumiendo responsabilidades de servicio, como Superiora o Vicaria de la Comunidad.
Quería y se hacía querer por las personas a quienes trataba. Como dato relevante señalar que, durante su estancia en el Psiquiátrico en Palencia, los novicios de San Juan de Dios le pedían consejo y gustaban de su compañía.
Desde Cangas de Onís, ya muy debilitada llegó a Benavides en 2015, poco a poco fue perdiendo la posibilidad de reconocer y relacionarse con los demás y así sin saberlo, disponible a la voluntad de Dios, hoy le llegó la llamada de Aquel por quien había entregado su vida y en Quien descansa en paz para siempre.
Gracias por su vida y testimonio.