

FMMDP en Red
Septiembre - Diciembre 2016
ASUNCIÓN GARCÍA CASADO
Nuestra hermana Asunción (Lucila) García Casado de la Comunidad de Mayores de Fuencarral, murió en la paz del Señor, a los 87 años de edad y 66 de vida religiosa el día 5 de octubre de 2016.
Nuestra hermana Asunción García nació en Castroverde del Campo, provincia de Zamora (España)
Con 18 años inició el noviciado en la Casa Madre, donde permaneció dos años para salir destinada a Barcelona. Fueron bastantes los destinos que tuvo a lo largo de estos años de vida Religiosa, desempeñando diversos servicios como secretaria, profesora, Directora de Colegios, incluido el Colegio Mayor de Salamanca; también ejerció el servicio de Superiora en algunas de las Comunidades por las que pasó. Somos muchas en la Congregación las que la recordaremos por coincidir con ella en la Casa Madre y por su afición por el canto litúrgico bien preparado, por su humor un tanto “socarrón” pero siempre por su deseo de hacer el bien.
Hasta 2012 estuvo en la Sede Provincial de Fuencarral, donde, ya jubilada de la enseñanza y como Superiora local, no dejó de lado su labor de apostolado parroquial, ni su preocupación por la vivencia de la eucaristía en los fieles, llevaba grupos de Asamblea-Misión, organizaba el despacho parroquial, era catequista… En medio de tanta actividad la enfermedad hizo mella en su cuerpo, pero la llevó con espíritu de “Amor y Sacrificio” y de la que estaba muy recuperada.
En la fecha indicada pasó destinada a la Comunidad de mayores. En la madrugada de hoy, una hermana de la Comunidad que estaba atendiendo a otra enferma, oyó un sonido, creyó que provenía de la habitación de Asunción y al entrar le dijo “estoy muy mala, me muero” y así ha sido, un infarto ante el cual nada pudieron hacer; el Señor se la ha llevado, como dicen las escrituras “la halló digna de sí”. Ante toda muerte, pero ante estas inesperadas sólo la fe puede dar sentido a la vida y a la muerte. Descanse en paz.

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SUSANA HERRERO CAÑIBANO (Petra)

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Nuestra hermana Susana Herrrero Cañibano (Petra), de la Comunidad de Mayores de Santiago de Compostela, murió en la paz del Señor, a los 91 años de edad y 64 de vida religiosa el día 15 de octubre de 2016.
Nuestra hermana Susana nació en Castroverde de Campos, provincia de Zamora (España).
La casa de Formación de Tortoreos fue el lugar de inicio de su vida religiosa; en esta comunidad hizo postulantado, noviciado y profesión temporal. La Casa Madre fue testigo de su entrega definitiva al Señor en septiembre de 1957, y también de su periodo de Renovación, compartida en Roma.
Cinco fueron sus destinos a lo largo de su vida: Orense, Santiago de Compostela, Fátima, Porto y de nuevo Santiago. En ellos su apostolado, como auxiliar de enfermera, ATS dejó la impronta de mujer fuerte y trabajadora, seria y a la vez cercana.
En 1964 llegó a la Comunidad de Santiago, cuando aún estaba la Residencia y la Casa Provincial; ella se encargaba de todo lo relacionado con el comedor, siempre muy responsable en su tarea, con mucha capacidad de trabajo y, aunque recia y seria sabía dar y recibir ternura. Era sociable y cercana con la gente, participó con el sencillo servicio en la parroquia, encargándose de tener siempre limpios los objetos de culto, purificadores, que a veces le llegaban por decenas.
Tenía mucha habilidad para la costura, para el ganchillo y bolillos, actividades manuales que practicó hasta que la demencia le impidió hacerlo.
Toda la vida, como no puede ser de otra manera, mantuvo su confianza en el Señor y en la oración, para gloria Suya y fortaleza en su quehacer.
Ya mayor y con pocas fuerzas se la veía a solas y a ratos en la capilla. ¡A SOLAS CON DIOS! en la tierra, hoy ya el Padre, también a solas, le ha dado el descanso y el abrazo esperado que nunca se acaba y siempre es nuevo. Descanse en paz.
DELFINA RODRÍGUEZ RANCAÑO
Nuestra hermana Delfina Rodríguez Rancaño de la Comunidad de Mayores de Fuencarral, (Madrid), murió en la paz del Señor, a los 95 años de edad y 68 de vida religiosa el día 6 de noviembre de 2016.
Nuestra hermana Delfina nació Veiros de Quiroga (Lugo, España). Su bautismo fue en su tierra natal, pero la familia se vino a Madrid y aquí inicia el noviciado en la Casa Madre en 1941, donde también profesa de votos temporales y perpetuos.
La casa de Monte Igueldo, (ahora transformada en noviciado) fue su primer destino, cuando estaba recién abierta y la situación era de precariedad en todos los campos. Todos los días y durante años, después de su tarea cotidiana salía a pedir por calles y casas para poder hacer el primer pabellón del Colegio y también poder vivir. Las comunidades de Ignacio Ellacuría y Miraflores fueron sus únicos destinos, hasta el 26 de septiembre que por su enfermedad fue recibida en la comunidad de Fuencarral.
Según datos recibidos de hermanas que han vivido con ella, su vida puede resumirse en una frase: “Hágase la voluntad de Dios” Todo para ella era y lo vivía como don, y ella fue don para la Congregación, para cada hermana, para la Iglesia, para la gente que conocía. Sus características como persona: el amor a la Congregación, la sencillez, la humildad, la alegría, la acogida, el servicio y disponibilidad para todos, sentido del humor sin miedo al ridículo con tal de hacer pasar un buen rato a quienes estaban con ella, siempre dispuesta para dar gusto a las hermanas, aún en las cosas más sencillas e insignificantes, su gran amor a la lectura le permitía conversaciones profundas.
¡Cuántos guisos cariñosos, cuántos uniformes para las niñas, cuántos niños mimados y queridos, cuanta entrega silenciosa!...... La enfermedad progresiva hizo que poco a poco estas actitudes fueran deteriorándose, pero aún en su inconsciencia, ya en Fuencarral, tenía momentos de lucidez y repetía a quién estaba a su lado: “Yo soy pecadora y vosotras muy buenas, perdóname, Señor”.
Gracias Delfi, por tu vida. Tú acogedora, hoy el Padre te ha acogido en sus brazos
misericordiosos. Con esperanza y fe decimos ¡YA HAS RESUCITADO!.
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CARMEN FERNÁNDEZ RODRÍGUEZ

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Nuestra hermana Carmen Fernández Rodríguez de la Comunidad de Mayores de Santiago de Compostela, murió en la paz del Señor, a los 98 años de edad y 73 de vida religiosa el día 28 de noviembre de 2016.
Nuestra hermana Carmen era natural de Cadones (Orense). La etapa de noviciado la vivió en la Casa Madre, donde hizo su primera profesión. Destinada a Galicia hizo su profesión perpetua en Tortoreos.
Dedicada por profesión a la sanidad, fueron varios los sanatorios y residencias en las que su presencia fue y sigue siendo recordada, aunque en alguno de ellos las situaciones y circunstancias no fueran demasiado favorables.
Mujer trabajadora, alegre solidaria; como superiora preocupada por las hermanas y por la Congregación. Siendo superiora de Lugo se fundó la Residencia Sanitaria y más tarde en el Sanatorio de Piñor. Aquí con motivo de sus bodas de plata le hicieron un pequeño homenaje del cual transcribo literalmente lo que se publicó en el periódico local: “su corazón abierto, su amor a los demás, su entrega total al enfermo nos hacen sentir por ella un gran afecto y admiración extraordinaria (…) En ese día una misa concelebrada en el Sanatorio y una embajada artística de la parroquia de Couto, llevó la alegría y el cariño a todos los enfermos y asistentes, como prueba del cariño y afecto de los que tanto la admiraban y querían”.
Recibió también la “Cruz de la Seguridad Social” por su labor prestada en la Residencia de Lugo. Cuando se retiró a los 70 años, otro homenaje oficial, nos permite reconocer el aprecio que por ella sentían los compañeros y autoridades con quienes trataba.
Pero el cuerpo tiene sus límites, llega a Santiago el 1 de septiembre de 2012 y aquí vive los últimos años necesitando la ayuda de las hermanas, ella, que como hermana se había entregado a los demás sin reserva.
Termino con otro texto literal de su homenaje: “sólo Dios podrá pagarle con el cielo su entrega a los demás”. Que así sea. Descansa en paz, M. Carmen.
ANTONIA SÁNCHEZ PERNAS
Nuestra hermana Antonia Sánchez Pernas de la Comunidad de Mayores de Benavides de Órbigo (León), murió en la paz del Señor, a los 83 años de edad y 62 de vida religiosa la noche del 27 de diciembre de 2016.
Nuestra hermana Antonia Sánchez Pernas era natural de Cesuras, provincia de La Coruña (España). Inicio su noviciado en Madrid, Casa Madre, la profesión temporal: el 12 de octubre de 1954 y su profesión perpetua las celebró también aquí en Madrid. Aprovechaba las diferentes etapas de formación y por ello participó en la Formación Posterior en 1978 y diez años más tarde en la Renovación.
En Madrid comenzó su misión dedicada a la educación de niños, pero fue sobre todo en los colegios de León y provincia, donde desarrolló su vocación a la enseñanza. En Torrelavega, y Clínica de San Francisco llevó la administración y en más de una comunidad ejerció el servicio de superiora local.
Desde el Hogar de niños, el 21 de marzo de 2015, fue destinada a Benavides ya enferma y necesitada de cuidados especiales. Las personas que han convivido con ella, la recuerdan como persona silenciosa, responsable en sus tareas, seria, sufriente, trabajadora y a su manera paciente.
Debido a su enfermedad, que la acompañó a lo largo de muchos años, fue perdiendo su capacidad de relación con el entorno y hacía más de un año que no conocía ni hablaba, simplemente se dejaba hacer.
Que el Padre Misericordioso compense con su gracia todo el bien que hizo y no tenga en cuenta sus debilidades como ser humano. Descanse en paz.

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